El ransomware se convierte en una de las industrias más rentables para los ciberdelincuentes

Llevamos viendo que sobre todo durante este último año, el ransomware es el tipo de malware más utilizado por los ciberdelincuentes. Han sido muchos los que han sido descubiertos por las compañías e investigadores de seguridad, e incluso se ha podido ver como después de conseguir su detección o descifrado de archivos, una nueva cepa de ese mismo malware ha aparecido un tiempo después con nuevas capacidades.

Teniendo en cuenta que este tipo de malware llega hasta los equipos con el fin de cifrar determinados archivos para que el propietario no tenga acceso a ellos, para después solicitar el pago de una cantidad de dinero para su rescate, ha hecho que el ransomware se haya convertido en el malware más utilizado a la vez que está suponiendo ser una industria en crecimiento.

Tanto es así, que según un nuevo informe realizado por investigadores de seguridad deCheck Point junto con IntSights Cyber Intelligence, en el que han analizado al famoso ransomware Cerber, los ciberdelincuentes responsables de la creación de Cerber, han podido llegar a ganar la sorprendente cifra de 195.000 dólares en un mes. Una cifra más que respetable y que es alcanzada gracias a las aportaciones de todos los usuarios infectados por este ransomware que han pagado por el rescate de sus datos.

En dicho informe, se habla de que al menos ocho nuevas campañas de ransomware son liberadas todos los días y consiguen infectar con éxito al menos 150.000 ordenadoresdistribuidos en más de 200 países distintos de todo el mundo. Y aunque se ha registrado que sólo el 0,3% de las víctimas opta por pagar el dinero solicitado por el rescate, se ha estimado que el autor de un ransomware de la talla de Cerber, puede llegar a obtener unos ingresos totales de aproximadamente 946.000 dólares, es decir, cerca del millón de dólaresen un solo año.

Entre los países más afectados en todo el mundo y donde los usuarios no dudan en pagar cuanto antes por recuperar sus datos, se encuentran Corea del Sur, Estados Unidos, Taiwán, China, Pakistán, Hong Kong, Israel o Italia.

Además, en la propia investigación se hace hincapié en lo fácil que es que casi cualquier persona pueda convertirse en un distribuidor de ransomware y de ahí que esta peligrosa industria esté creciendo exponencialmente.

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